¿Y cuál es tu actitud?

Muchas personas que dicen ser cristianas, tienen una actitud totalmente diferente en su día a día. Piensan que el hecho de creer en Dios, en Jesucristo y en el Espíritu Santo, y el ir a la iglesia los domingos, ya los hace merecedores de la gracia, el perdón, y que son merecedores de la salvación de los últimos días.

¡Que gran mentira!

¿Qué es lo que piensa este tipo de "cristianos"?. Pues que el hecho de profesar la fe y de leer la Biblia todos los días, ya les reporta una tranquilidad que, según ellos, les llevará a la salvación, pero no saben que, sin darse cuenta, se están condenando, y si guían por ese camino a algún hermano, están condenando a su vez a más personas con ellos.

Video: Falsos cristianos



Una fe sin obras es una fe muerta (Santiago 2,14-26), como afirma Santiago, y es que, ¿de qué sirve ir a la iglesia los domingos si durante la semana hacemos caso omiso de lo que en ella se intenta transmitir?, ¿y de qué dirve echar alguna lagrimita cuando se ve alguna película cristiana que nos haga sentir, si a continuación vamos a recordarnos cuán lejos estamos de llegar a ese punto de cristianismo?. ¿Acaso la recompensa no es lo suficientemente alagüeña como para luchar por ella pase lo que pase?

¡Que estamos hablando de la salvación de nuestra alma!

Reflexiona si eres de esas personas que emiten una queja continua por múltiples cuestiones en tu día a día, ya que esa actitud te alejará progresivamente de Dios y, un día, apenas sin darte cuenta, ya no le encontrarás sentido a nada, porque las cosas y preocupaciones del mundo te habrán ganado la partida.

Video: La venda de la queja contínua y la actitud correcta del cristiano



La lucha para alcanzar la meta es dificil, dura, repleta de tribulaciones y de caídas, que muchas veces pondrán a prueba nuestras fuerzas, pero......... si seguimos el camino correcto......

¡Qué recompensa más maravillosa la de estar al lado de nuestro Señor!

La mayor parte de las personas que, una vez conoce el camino que le llevará a la salvación, se echa atrás, lo hacen por una falta de actitud total. ¿Qué significa esto?. Pués que cuando se dan cuenta de que aún les queda mucho para llegar a tener una vida que dignifique la palabra de Dios, no están dispuestos a luchar lo que es necesario para llegar, y se rinden sin saber que están ofreciendo su alma en bandeja al diablo.

¡Y qué fácilmente admiten que iran al infierno!

La actitud en nuestro día a día, el superar los problemas con la oración y la palabra como nuestra armadura en el día malo, y el NO CONFORMISMO, nos llevarán, en su momento, a una vida repleta de gozo y bendiciones.

Video: Bendiciones de Dios



Pero para llegar a ella hará falta no poca lucha, y el erradicar de nuestro vocabulario las siguientes expresiones:

-Yo soy así.
-No puedo más.
-Etc.....

¿Cuál es la actitud correcta?. Apoyarse en Jesucristo nuestro Señor, no rendirse nunca, y no aceptar nuestra situación actual, ni hacérsela aceptar a los demás.

¡Dios te puede cambiar!

Pero si uno mismo es el que se rinde, ¿que sentido tiene seguir luchando?, ¿o leer la Biblia?, ¿o ir a la iglesia?. Sin una actitud correcta, ¿en qué nos diferenciamos de los fariseos de la época de Jesús?, que vivían la religión, pero sus actos y obras iban en contra de los designios de Dios.

No seamos hipócritas, porque sólo si anhelamos que Dios nos moldee, y no aceptamos con conformismo nuestra situación, podremos avanzar en este gran camino que Dios tiene preparado para nosotros.

Pregúntate........... ¿Acepto que Dios me cambie?

Buscar a Dios

(Texto extraído de: La Palabra para hoy "Vitaminas para cada día")

"El Señor había cerrado su matriz" (1 Samuel 1:5 RV Antigua)

A veces no se abrirá esa puerta a la que llamas hasta que no entiendas el motivo de por qué se cerró.

 Considera la historia de Ana: ella quería un hijo, pero Dios quería un profeta. Cuando oró: "Si das a tu sierva un hijo varón, yo lo dedicaré al señor todos los días de su vida (1 Samuel 1:11). No sólo Dios le concedió a Samuel, sino también otros seis hijos más (véase 1 Samuel 2:5).

 Cuando oras por una cosecha, Dios te pedirá que siembres una semilla. Tal vez esa semilla sea algo que estimas mucho y a lo que te aferras; no lo retengas, sino entrégaselo a Dios.

 Ana comprendió que lo único que la llenaría era la voluntad de Dios. Elcana tenía dos esposas, pero Ana era su preferida, por lo cual le daba "doble porción" de sus posesiones (véase 1 Samuel 1:5). Si no estás cumpliendo el cometido encomendado por Dios, ni el amor de las personas ni las cosas materiales te satisfarán.

Las personas "ordenadas" no son sólo aquellas que hablan en los púlpitos. Ana fue ordenada para ser madre. Tal vez tú hayas sido ordenado para ser secretario, o paisajista o profesor. Descubre cuál es tu llamado divino ¡y cúmplelo!.

 La propia desesperación de Ana la condujo a su destino: "El Señor había cerrado su matriz". ¿Por qué?. Fué una llamada de atención para que ésta se acercara más a Él. Los momentos duros nos hacen evaluar nuestras vidas y buscar a Dios de forma mucho más intensa.

 En esas situaciones cambiamos el enfoque, de "Señor, esto es lo que quiero" a "Señor, ¿qué es lo que tú quieres?". Y es entonces cuando Él nos bendice, porque "es galardonador de los que le buscan" (Hebreos 11:6).

Video: Dios es la respuesta