viernes, 28 de octubre de 2011

¿Eres una persona de doble ánimo?


En la palabra de Dios, y más concretamente en la carta de Santiago, se hace referencia a un tipo de personas muy específico. Él las llama "de doble ánimo". ¿Qué significa esto?. Vamos a detallar en en esta reflexión, en qué se caracteriza la persona de "doble ánimo", y qué consecuencias tiene en tu vida pertenecer a este tipo de personas.

1. Una persona de doble ánimo es una persona que dice confiar en Dios, pero hace todo lo contrario. Dice ser cristiana, pero le cuesta mucho dar amor y en su vida son predominantes los enfados, la ira y, sobre todo, la falta de felicidad.

2. Una persona de doble ánimo es aquella que confía tanto en Dios y le ora tantas veces al día, que supone que así el Señor la ayudará, pero en su corazón desconfía de su voluntad, de su poder, de su autoridad,etc....

3. Son personas que dudan de todo y su pensamiento está continuamente divagando con preguntas como las siguientes:

-¿Sigo en el trabajo o me lo dejo?
-¿Sigo con mi pareja o me la dejo?
-¿Dios me va ayudar o me va a dejar solo con mis problemas?

.........y generalmente las dos partes de las preguntas tienen la misma fuerza, es decir, luchan tanto por conservar el trabajo como por buscarse otra cosa, pelean por la pareja pero al mismo tiempo la van alejando de su vida con malas actitudes, palabras hirientes, etc....., y piensan que Dios solucionará sus problemas, al mismo tiempo que dudan de que lo vaya a hacer. Esta ambigüedad en sus vidas hace que no sean capaces de luchar, ya que es imposible luchar cuando tus fuerzas están divididas y repartes tus esfuerzos por igual en dos direcciones, con lo cual, cualquier esfuerzo por solucionar algo o lograr una estabilidad, se anula.

4. La persona de doble ánimo, por lo general, quiere seguir a Dios, pero al mismo tiempo tiene un desánimo enorme porque ni le entiende, ni le siente, ni le llega, y al fin le embarga un sentimiento de abandono por parte de Dios que, en momentos clave, les llevan a entrar en depresión y, como no ven que Dios hace en sus vidas, y como su estado de "doble ánimo" les domina, llegan a paliar los problemas con medicaciones, drogas, alcohol,etc....

5. Una persona de doble ánimo suele orar mucho al Señor, pero como su estado es de duda continua con respecto a todo: su vida, su relación, su trabajo........ todas las oraciones que realize no sirven de nada, y día a día su estado viene a ser de mayor desesperación.

En la palabra de Dios Santiago es muy tajante con respecto a la persona de "doble ánimo":

"......el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor, ya que es persona de doble ánimo e inconstante en todos sus caminos."

Habrá quien interprete por propia conveniencia la palabra de Dios, para no ser tan duro consigo mismo, pero lo cierto es que, si dudamos, el Señor no va a atender nuestras oraciones en ninguno de los campos de nuestra vida.

Podremos endulzarlo todo lo que queramos, pero si estás pasando por problemas ahora mismo y te has sentido identificado como un hombre/mujer de doble ánimo, te insto a que dejes de orar al Señor por el problema que tienes, y te centres en el problema. Pidele ahora mismo al Señor que te ayude a dejar de ser una persona de doble ánimo, y lucha fervientemente por, en todas las areas de tu vida, situarte en una posición y luchar por aquello que decidas, sin dudar, y si no dudas, será entonces cuando el Señor atenderá tus súplicas.

¿Sabes por qué el Señor no atiende las oraciones de la persona de doble ánimo, que duda en todo?. Muy simple, porque el que duda, un día le ora por mantener el trabajo, al día siguiente, si le va mal el día, le ora por que le consiga otro trabajo más adecuado..... un día ora al Señor para que bendiga a su pareja y al día siguiente le pide al Señor que le muestre si deben estar juntos o no........... Es imposible satisfacer la oración de una persona de doble ánimo, porque pase lo que pase, se sentirá insatisfecha, abandonada y desgraciada.

Vuelvo a repetirte, hermano, que la vida no es un juego, y que, como dijo nuestro Señor Jesucristo:

"...vuestro si sea si, y vuestro no sea no..."

Si estás con Dios, confía en Él, se fiel a pesar de la prueba, nunca retrocedas. Si tu pareja te ama, tu le amas y queréis estar juntos, lucha por ella sin dudar nada, pase lo que pase y superando juntos las pruebas que aparezcan por el camino, el qué dirán y los ataques del maligno. Si tienes trabajo y lo quieres consevar, pues lucha por Él, a pesar de los días malos.

Finalmente, deciros que, si os habeis dado cuenta de que sois personas de doble ánimo nada está perdido, pero os pido encarecidamente que dejeis de orar por todo ahora mismo, y orad bien, por las cosas de Dios, pedidle a Dios por vuestro "doble ánimo", porque si no lo hacéis, de nada servirán vuestras oraciones. No hay termino medio. Si dudas, no tendrás cosa alguna del Señor. Si te entregas a Él y te mantienes firme en todos los aspectos de tu vida, por muy angosto que sea el camino, Él te ayudará y atenderá tus oraciones.

Puedes seguir dudando, pero se consciente de que si sigues dudando del trabajo, de la pareja, de Dios, y de otras facetas de tu vida, te estarás perdiendo multitud de bendiciones y maravillas que el Señor tiene preparadas para ti.

Que Dios os bendiga a todos, y recordad, nunca es tarde para hacer lo correcto. Arrepentíos, porque abogado tenemos para con el Padre.