Un nuevo día, una nueva vida............

¿Qué sientes cuando ves salir el sol cada día?. ¿No es precioso?. Estamos tan acostumbrados a que eso suceda que no lo apreciamos en su justa medida. Y es que............

Cada vez que sale el sol significa que empieza un nuevo día, con todo lo que ello conlleva. Por delante nos espera un jornada repleta de: alegrías, oportunidades, experiencias, errores, aciertos, decisiones y, lo que es más importante, una larga jornada que podemos dedicar a nuestro Dios.

Si ayer fallaste no importa. Si no fue un buen día, ya pasó. Una nueva oportunidad se extiende ante nosotros para CAMBIAR......... Importante palabra. ¿Cambiar qué?. Cambiar el modo en que vemos el mundo, cambiar el modo en que vivimos, cambiar el modo en que miramos a los demás........... Hay tanto que cambiar en nuestro interior.

La palabra nos dice que no debemos ser sabios en nuestra propia opinión. Deja que los demás sean quienes observen tu caminar, tus cambios, tu progresar como cristiano en tu día a día. ¡Que gran cambio!. De vivir basado en las cosas del mundo, a vivir alimentando el Espíritu. No dejes ese cambio para mañana.

¡HOY ES EL DÍA!

Dios llama a tu puerta, desea moldearte como alfarero, pulir tus fallos, perdonar tus errores, con el único propósito de que alcances la salvación, pero debes querer hacerlo. Hoy es un nuevo día, una nueva oportunidad para que Jesucristo te acompañe. Siéntelo, porque está a tu lado, te coge la mano en cada obstáculo para no dejarte caer, te asesorará en cada decisión que tomes en el día de hoy.

Sólo debes.................ESCUCHARLO.

"No os angustieis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su propia preocupación. Basta a cada día su propio mal." (San Mateo 6,34)

Si nos apoyamos sólo en nuestras fuerzas para seguir el camino, es muy probable que las dificultades y los problemas de este mundo nos venzan. Dios está esperando escuchar tu oración, desea que cuentes con Él para acompañarte en el día de hoy. Un nuevo amanecer, una nueva oportunidad para hacer lo correcto.

No sufras por el ayer, no te preocupes del mañana. Vive el día de hoy como si fuese el último, ama a tu prójimo como si no lo fueses a ver más. ¿Acaso tenemos un contrato firmado que dice que mañana seguiremos aquí?. Estás a tiempo de valorar esas pequeñas cosas, ese nuevo amanecer, esas cosas que Dios cada día nos regala.

Que Dios bendiga tu día.......... y vive este día, porque no se repetirá. Es único, como tú.

Video:El Amor